EL PALÍNDROMO

Al llegar la noche, me sentí agotado, toqué la cama y me quedé dormido. La tarde transcurrió paseando con mi mujer y mi hijo, por el puerto de Alicante y tambien montando en los cars. Nos fuimos a comer, y toda la mañana la pasamos conduciendo en dirección a Alicante. Antes de iniciar el día salí a correr por la zona donde vivo, odservando el paisaje nevado, desayuné , y me desperté de una noche agradable.